Por Junior Velásquez Chero

Desde la colonia hasta la actualidad, hemos ido concibiendo diferentes perspectivas de lo que significa educar y, con ello, establecido distintas herramientas de apoyo a la enseñanza. No obstante, una de las herramientas pedagógicas que han perdurado hasta la actualidad son los manuales o textos o escolares, los cuales permiten al docente desarrollar los conocimientos, capacidades o aptitudes de sus estudiantes, según fuere el enfoque educativo.

Bajo distintas perspectivas, los textos escolares siempre han respondido a una necesidad determinada, tanto educativa como religiosa y/o política. En la colonia, por ejemplo, el paradigma educativo era parametrado por el catolicismo y la corona española, buscando un adoctrinamiento católico elitista con la finalidad de establecer su dominio en sus territorios de ultramar. En el periodo republicano la educación sufrió un cambio gradual de paradigma, enfocándose más hacia la defensa de lo nacional y luego esbozando los arquetipos de los primeros héroes de la nación.

En este contexto tenemos el texto de José Domingo Cortés, Simón Bolívar, reseña histórico-biográfica para las Escuelas Públicas de Bolivia i el Perú. Santiago de Chile: Imprenta de “El Independiente”, de 1872. El texto no solo estaba destinado a los niños en etapa de formación escolar, sino también a los soldados de los países mencionados, en un intento de generar conciencia nacional. En este material, se interpreta los logros independentistas sudamericanos como consecuencia del progreso y de la expansión de las ideas liberales que iban avanzando por el mundo tras la Revolución Francesa y la Independencia de las 13 colonias.

Para el mismo contexto tenemos los textos escritos por Enrique Benites, profesor de profesión quien, siguiendo la tendencia positivista de la época, planteaba la necesidad de una historia lineal y sin contaminación externa. Es aquí cuando empezamos a notar más claramente que la pedagogía no solo empezó a reforzar las nacionalidades y nacionalismos, sino que, siguiendo una tendencia mundial de evolución de la ciencia, cambió de paradigma teocentrista por uno cientificista orientado hacia una epistemología de todas las ciencias. Benites escribió Curso de Historia del Perú para el Colegio Peruano, en 1873 y Curso de Historia del Perú para instrucción media, en 1887. Ambos textos suman hechos históricos y los describen de manera lineal. Lo más importante es que el segundo, escrito post guerra del Pacífico, contiene aportes en cuanto a la construcción de los discursos históricos en relación a una narrativa nacionalista.

El siglo XX trajo nuevos aires a la educación nacional. Mientras que el siglo anterior se apoyó en la ciencia para empezar a forjar una idea de nación y establecer nuevas élites, durante el largo siglo XX se consolidaron discursos y establecieron nuevos simbolismos basados en los conflictos bélicos y el ascenso de la clase militar al poder político.

Carlos Wiesse Portocarrero fue un abogado, diplomático, docente y destacado historiador peruano, fundador del Instituto Histórico del Perú, que dedicó gran parte de su carrera a la elaboración de textos historiográficos. En, Resumen de la Historia del Perú de 1912; Historia del Perú Prehispánico. Dedicada a los Colegios de Segunda Enseñanza y Escuelas Especiales de 1918; Historia del Perú Colonial. Dedicada a los Colegios de Segunda Enseñanza y Escuelas Especiales, también de 1918; y, por último, Historia del Perú Independiente (La Revolución). Dedicada a los Colegios de Segunda Enseñanza y Escuelas Especiales, de 1920, Wiesse plasma una visión de la historia orientada a la presentación de un país redimido, compuesto de un pasado propio (uso del término pre colombino) y en consolidación y proceso de paz. Además, anota a los procesos de independencia como una necesidad que nos la “concedieron” las élites nacionales, desvalorando la participación de las comunidades andinas. El aporte de Wiesse Portocarrero resalta en su facilidad para escribir y describir procesos históricos complejos, aunque, en una crítica desde nuestra posición actual, podemos agregar que se tenía todavía el sentido paternalista de una independencia concedida.

Por su parte, los textos de historia del Perú elaborados por el historiador Gustavo Pons Muzzo para educación secundaria fueron los de mayor circulación entre los centros educativos nacionales entre las décadas de 1950 y 1970. Como fuente, resulta importante para observar las herramientas de instrucción de la época, lo que nos permite comprender el eje principal de la educación peruana en los años previos al sesquicentenario: la construcción de una consciencia nacional.

En suma, los procesos históricos por los que hemos pasado como nación, como país y como sociedad han ayudado a configurar las versiones de la historia que se presentan a la educación en todos sus niveles. El presente aporte pretende ser el punto de partida de investigaciones que vayan más haya respecto al estudio de la educación y procesos educativos nacionales, tomando en cuenta la multidisciplinariedad con la que se debe enfocar el estudio, entendiendo a la educación como un medio para la difusión de ideas, ideologías, paradigmas y, sobre todo, como un medio de uso político como lo hemos visto a través del tiempo. En los textos escolares podemos encontrar mucho de esta construcción historiográfica.

Textos Escolares

La obra de Carlos Wiesse Portocarrero

La obra de Gustavo Pons Muzzo

Primer año de Educación Secundaria: Periodo Autóctono

Segundo año de Educación Secundaria: Descubrimiento, Conquista y Virreinato

Tercer año de Educación Secundaria: Emancipación

Cuarto año de Educación Secundaria: República

Quinto año de Educación Secundaria: Historia de la Cultura Peruana

Créditos: Google Books, HathiTrust, Internet Archive.